Me invitaron a tomar un mojito. La invitación fue de una amiga, me dedique a escuchar y ser aquella persona que en ése momento se necesita ...
Mis diablos se comportaron (los tengo educados, pero atentos cuando se trata de ayudar a una amistad).
Desperté de mi letargo al segundo mojito, la sacudida y las palabras mágicas que coordinaron demonios, sinceridad, humanidad, empatía, respeto y una profunda admiración fueron las siguientes:
-Yo espero que haya podido encontrar a aquella persona en quién pueda confiar- me dijo.
No entendí en primer instancia, sus palabras fueron confusión, hasta que contesté:
-Agradezco tu sinceridad, no soy culera. Soy más bien de aquellas que jamás te haría daño a no ser que tú me mordieras primero-.
-Lo sé, eres cabrona y yo espero que no seas culera-.
-Ahora sí tienes mi amistad completa- le dije sin rodeos. Quién te habla sin miedo y con la mayor sinceridad, tiene a sus demonios dominados y a los míos atentos . Así no'mas.
Podata : Sabes que los mojitos me encantan.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario