te confieso que también pienso fatalidades y diferentes escenarios.
Te confieso que mis emociones se merman, cuando la desilusión toca mi puerta.
Te confieso que estar sin alas, me ha roto las ganas.
Te confieso que mis tentaciones dejaron de ser alimento para los demonios,
te confieso que la rutina rompió mis premisas.
Te confieso que sólo me he confesado una vez, desde que acepté a Dios en mi corazón.
Te confieso que he besado con los ojos abiertos y ése día, pude mirarte sin anestesia.
Te confieso que el rubor siempre me hizo sentir bonita.
Te confieso que, no soy mujer de fantasía , existo, siento y me enamoro con poemas ...
Te confieso que las canciones me hacen soñar.
Te confieso que mi hora favorita del día es la noche; pienso con mayor claridad mi existir.
Te confieso que me gusta ser musa, inspiración y locura.
Te confieso que me di cuenta de la falsedad de aquellos amigos (no existen).
Te confieso que, me importa aquello que digo que no.
Te confieso que odio a Mecano y que el cigarro me recuerda el calor de tus malditas palabras.
Te confieso que dibujo altares y aún, tengo una vela, por si regresas a mí.