Me dijo que al meditar se despedía.
Yo digo que siempre fue de voluntad inquebrantable.
Hoy escuché a tus labios recitar el método para darle fin a varios ciclos.
De mi pecho no llueve agua.
de mis manos, resplandece la energía.
Mientras éso sucede y aprendo a manejarlo
Cierro ciclo y entro en "equilibrio"
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