
Fue espectacular cuando al ir a la "Guelagetza", en Oaxaca, vi aquellas mujeres de cabello rizado provocando con aquellos pasos lindisimos algo más que el placer del baile, era algo ardiente, algo mágico que sólo la cabellera rizada le otorga, entregada por completo al son del viento. Acariciar, tocar, imaginar aquella textura de su melena rizada,- inspira al pecado- me dije. Al descubrir semanas antes éste escrito que pusieron por el metro Pino Suárez entonces entendí;
"la escencia del miedo radica en el descubrimiento de sensaciones nuevas y más si van a compañadas de deseos".
Siempre fue asi?; será verdad que el miedo por la mujeres de cabello rizado radica en lo que nos incitan y no en la catastrofe de una imagen deslieada. Mentira o Verdad, pero que ardientes son.
"Replica de Tlaltecuhtli"
Pieza original se encuentra en el Museo del Templo Mayor